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El amor suma y multiplica, no resta ni divide!

¿Y tú, cómo estás? fue la pregunta regular de la gente que poco a poco se iba enterando del embarazo de Nat, del futuro hermano o hermana de las chancletas, imagino que termina siendo normal o hasta lógico que la gente piense que podría yo estar venido a menos, cabizbajo, meditabundo, nauseabundo y triste pero no, no sólo no lo estoy, sino que además estoy contento, tranquilo, podría decirse que hasta feliz, mis hijas andan emocionadas y Nat, que en algún momento de su vida había decidido no tener más hijos también lo está, un hijo es una bendición y ella hoy es bendecida con la llegada de su tercer hijo (a), y yo, que suelo muchas veces dejarme llevar por la emoción y filtrarme por la razón, me he auto candidateado como padrino, cosa que no creo que suceda, pero me resultaba importante plantear mi candidatura.


Toda esta situación me transportó a los diferentes momentos en que, estando ya separado de Nat, me enfrenté a realidades que progresivamente han ido mejorando, que escaparon de mi control en algún momento, que me pusieron dubitativo en otros, a veces nostálgico, pero en otros muy seguro, tranquilo, relajado y feliz, he aprendido que somos nosotros mismos quienes nos complicamos, quienes elevamos el grado de dificultad de las cosas, quienes decidimos no soltar, ponérnosla difícil…adiós a las dificultades y a los dramas, yo he decidido vivir tranquilo, y por ende tentar ser feliz…pero en fin, los momentos de los que hablo son:

  1. “Conocí a alguien”…fue mi etapa más crítica, mi sobredosis de emociones extremas, mi periodo más descalibrado, cierro los ojos y no soporto la imagen que recuerdo de mí en esos días, pero entiendo que necesitaba seguir mi proceso, y ese fue momento fue indispensable.

  2. “Quiero que las chicas lo conozcan”…no me costó tanto como la primera, pero también peleé duro para que no suceda, al final analicé las cosas, decidí soltar, no dejé que el orgullo, el egoísmo y el machismo me vuelvan a gobernar.

  3. "Conocerlo yo" …fue mi momento más fresh, me sentí empoderado, dueño de la situación, canchero, nos quedamos hasta tarde tomando y hablando en casa y recuerdo bien que, al irme, crucé la puerta y me dije a mi mismo “lo hiciste”.

  4. “Nos mudaremos en diciembre” …pensé que me dolería más, no fue así, lo procesé rápido, puse manos a la obra en lo logístico y sólo me cogió la nostalgia cuando fui al devolver el departamento y lo encontré vacío, tuve un flashback sobre mi familia, sobre mis días ahí y me senté en el piso a procesarlo, luego salí y seguí.

  5. "Las chicas van a tener un herman@" ...en verdad no fue aterrador, aunque si sorpresivo, hablábamos de varias cosas a diario y no había señales de un tema así de un momento a otro, me sorprendió tanto que olvidé felicitarla, pero si lo procesé rápido y me imaginé a mis hijas felices por la noticia, le pregunté si ella estaba bien, me dijo que sí y todo siguió su camino, normal, alturado y maduro.

Quizá hubo un momento en que no estuve bien, es parte del proceso, pero soy un hombre fuerte y con un alto sentido de la responsabilidad y el amor por mis hijas, ellas giran y revolucionan mi mundo y saberlas bien, fuertes, emocionalmente sanas y felices al igual que su mamá, me dieron las herramientas necesarias para seguir por mi propio camino en busca de tranquilidad y paz, si ellas están bien, yo siempre lo estaré.


Al final, nuestra idea es sólo una y es muy fuerte, el amor verdadero, ese que trasciende hacia nuestros hijos no es un amor que resta ni divide, sino que es un amor que suma y multiplica y hoy mis chancletas hermosas, tienen además del amor de sus padres, una dosis fuerte de extra amor, de las personas que ponemos en nuestras vidas y que llegan a generar más y mejores cosas.

Papá Chancleta

Mi nombre es Said Guerra, aunque hay quienes me llaman también por mi segundo nombre que es Jonathan, tengo 38 años.

Administrador de empresas de profesión, con un posgrado en gestión de procesos, además dirijo la gestión de Recursos Humanos en una empresa privada.

Tengo pasatiempos variados como: leer, escribir, ir al cine, al teatro, adoro los tatuajes, me gustan los perros y también los gatos, colecciono juguetes en miniatura y me apasionan las series como Game Of Thrones, The Walking Dead, The BlackList, etc.

Pero por sobre todas las cosas amo a mis hijas, mi vida gira en torno a ellas y lo disfruto casi casi demasiado.

Las chancletas son dos niñas hermosas, hijas de padres separados que se llevan o intentan casi siempre llevarse bien en beneficio propio pero en especial en beneficio de ellas.

Nuestros Amigos
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