top of page

Familia de 6

Uno más uno, no siempre son dos, a veces pueden ser seis, y ese es nuestro caso.


Años atrás, con altas dosis de romanticismo encima, usaba en estricto la frase: “uno más uno, a veces suman cuatro” en alusión a mi unión matrimonial (1+1), que dio por resultado a Vale y Lu (2), por aquel entonces éramos un 4 contundente que no admitía discusión. Lo afectivo y familiar, le ganan a las matemáticas, ¡punto!


Ok Said, te damos eso, pero el seis, ¿de dónde sale?

Ah bueno, de una reflexión espontánea hecha el otro día tras contarle a Vale y Nat sobre la persona con quien estoy actualmente. Vale soltó un ¡Wuuuuu!, y la colorada preguntó sonriendo, ¿y ya sabe la familia extraña que somos?, a lo que respondí sin dudar: “Claro, ella sabe que somos una rara #Familia de seis”, que claro, incluye a su novio y a su hija en común.

Es aquí donde más de uno, entrará en “CHOK” (como dice Vale), cuestionará, pondrá peros, objetará y usará argumentos absurdos, basados en motivos tan vagos como: lo normal, la ley, la biblia, la sociedad y algún otro prejuicio.

Para el derecho, la familia es el grupo de personas relacionadas por un grado de parentesco, y este al mismo tiempo puede ser por: consanguinidad, civil y por AFINIDAD.

Para mí, la familia es la que se apoya, se protege, la que no pone trabas, la que está contigo en las buenas y en las malas, la que entiende y respeta el rol de cada uno, la que da amor y soporte sin otro fin que la unidad y la vida en paz. En resumen, la que rema contigo en la misma dirección.

Y desde algún tiempo, esta es mi familia: Nat y yo siendo padres de Vale y Lu, su novio siendo un padre excepcional con su hija, y de soporte increíble para las mías, y los tres, con respeto, madurez, cordialidad, e incluso afecto sano y real, agradecidos por saber que contamos los unos con los otros, integrando incluso a nuestras familias, teniendo como logro primordial, una vida mejor, sana y alturada para las niñas, donde no solo tienen el amor de sus padres, sino una dosis extra, de quienes llegamos o estamos, y estaremos ahí pase lo que pase.

Lo siento Pitágoras 1+1 para nosotros terminó sumando 6.



Papá Chancleta

Mi nombre es Said Guerra, aunque hay quienes me llaman también por mi segundo nombre que es Jonathan, tengo 38 años.

Administrador de empresas de profesión, con un posgrado en gestión de procesos, además dirijo la gestión de Recursos Humanos en una empresa privada.

Tengo pasatiempos variados como: leer, escribir, ir al cine, al teatro, adoro los tatuajes, me gustan los perros y también los gatos, colecciono juguetes en miniatura y me apasionan las series como Game Of Thrones, The Walking Dead, The BlackList, etc.

Pero por sobre todas las cosas amo a mis hijas, mi vida gira en torno a ellas y lo disfruto casi casi demasiado.

Las chancletas son dos niñas hermosas, hijas de padres separados que se llevan o intentan casi siempre llevarse bien en beneficio propio pero en especial en beneficio de ellas.

Nuestros Amigos
bottom of page